
Daldry sigue su propio trabajo en
Billy Elliot para volvernos a trasladar en la mente de un chico diferente,
introvertido que le cuesta relacionarse con la gente y expresar sus
sentimientos. En esta ocasión se centra en Thomas Schell, un chico introvertido
con un fuerte vínculo con su padre quien intenta hacerle relacionar con la
gente mediante juegos detectivescos. Después de la muerte de su padre en los
atentados del 11-S contra las Torres Gemelas, Thomas encontrará una llave
escondida en un jarrón. A partir de ese momento su único objetivo será
encontrar la cerradura que abre la llave. En esa aventura se unirá un
misterioso personaje, The Renter quien le ayudará a superar algunos de sus
miedos.