viernes, 21 de agosto de 2009

The Fall, poesía visual


De vez en cuando, entre película mediocre y película mediocre aparece una sorpresa que te ayuda a seguir viendo películas una detrás de otra. Y es que a veces esa película que ves sin saber apenas el argumento, esa que has dejado para otro día en varias ocasiones acaba resultando una grata sorpresa. Eso es más o menos lo que me paso con The Fall.

Muchas son las películas de gran calidad que al ser producidas por países que no son europeos o americanos no consiguen tener ni una campaña publicitaria ni la repercusión que se merecen. La gente va a ver Transformers, se marea con las peleas de chatarra, en la sala pequeña del multicine pasan películas menores que en la mayoría de veces les dan 100 vueltas a los blockbusters veraniegos. Y eso que The Fall contaba con un premio que recibió en el Festival de Sitges, pero ni eso fue suficiente para que la vieran. Yo tampoco la vi en el cine, la vi unos años más tarde, pero desde que la vi, que espero con ansias el dvd, que por fin salió a la venda hará cosa de un mes.
El filma nos situa en Los Angeles de los años 20. Un especialista está hospitalizado después de una caída con un caballo, de la que se sospecha que ha sido voluntaria y por tanto un intento de suicidio, después de haber sido dejado por su novia. En otro edificio del hospital tenemos a una niña, Alexandria, hija de emigrantes, que se ha caído mientras recojía naranjas. Alexandría posee una personalidad curiosa e inocente como cualquier niña de su edad. Mientras va explorando el hospital se encuentra con Roy Walker, el especialista que le promete contarle un cuento lleno de aventuras, de piratas, de vengadores... Así empezará la relación entre Roy y Alexandria. Una extraña relación de dependencia, compañerismo, amistad... Todo mezclado con el épico cuento que Roy va contando a la niña.


The Fall es una de esas películas que puede tener muchos fallos pero que tiene ese no sé que, tiene alma, en cada fotogramase ve el empeño del director, guionista, actores y profesionales que confiaron en que algún día saliera a la luz una película como ésta. Y como mínimo para mí lo consiguieron. No fue fácil, 4 años de grabación pasando por 28 países que sirven para ilustrar de manera megalomana (el Machu Pichu, el Taj Mahal, las Piramides, el Colisseo, son solo algunas de las maravillas que aparecen en pantalla) y épica el cuento con el que Roy ilusiona e hipnotiza día a día a la niña.

Su director se sirve de los paisajes y los monumentos más espectaculares para contextualizar un cuento sobre 4 personas: Luigi, Darwin, el bandido azul y el Indio, 4 "forajidos" que han jurado vengarse del governador Odio, porqué este les destrozó su vida. Un mágico e épico cuento sobre la amistad, la confianza, pero también la venganza y duras y sangrientas batallas, todo dependiendo del humor de Roy. Con un prólogo sobre Alejandro Magno, hombre que dado a su insaciable afán conquistador lo perdió todo, el director avisa, este cuento va a ser muy grande. Una historia que hace que el espectador se vuelva pequeño ante tanta magestuosidad.


En el film nos muestran a dos personajes solos, bajo circunstancias diferentes. Los dos se vuelven dependientes a diferentes cosas. Roy cree que necesita sus pastillas, para acabar una vez por todas con su dolor; y la joven Alexandria espera ese cuento que le hace vivir lejos de ese deprimente y aburrido hospital.

Interpretativamente todos juegan bien su papel. Destacando a la jovencísima Catinca Untaru que intepreta a Alexandria y a Lee Pace, donde vemos en un papel bastante diferente que en el de la serie Pushing Daisies. Quizás en algun momento le falta un poco de intensidad en su actuación, sobretodo en el último tramo, pero aun así está bien.

Como conclusión, el film es una buena mezcla de realidad y ficción, mágico y épico, la historia puede ser algo simple, en algunos momentos puede sonar ridícula, pero si entras en su juego no lo hará. Visualmente impecable, y impresionante.

Nota: 8'5/10

1 comentario:

  1. Me uno a la recomendación, una maravilla. Lo increible es que todos esos escenarios son reales, no hay ninguno generado por ordenador. Y hay una historia muy buena detrás de lo visual.

    Saludos!

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