
El film supone dar continuidad a los flashbacks que han ido mostrándose en la trilogía de X-Men. Nos cuenta como Lobezno (Wolverine) nacido en el siglo XIX, mata a su propio padre con sus garras y promete estar junto a su hermano, Victor Creed siempre. Juntos pasan y viven diferentes guerras (resumidas en los primeros minutos de créditos inciales simplemente magníficos) hasta que en un acto de rebeldía Victor mata a uno de ellos, y Logan le ayuda y lo defiende. Para salir de la cárcel se unen al general Stryker y a sus secuaces, otros mutantes con superpoderes. Al ver la crueldad de sus acciones, Logan decide retirarse y encuentra el amor y se va a vivir en el monte. Stryker al localizar a Logan traza un plan para que le deje experimentar con el adamantium. Por tanto el film nos explica como Lobezno se expuso a los experimentos de Stryker y como éstos se volvieron contra el general.
Aunque no es habitual, el film se basa más en el guión que en las batallas, mamporros y FX, hecho que ha provocado la cólera de muchos aficionados que esperaban ver una película de acción y de superhéroes y se han encontrado con un drama

¿Sabes porqué la luna está sola? Porqué tuvo un amante. En un mundo más allá de lo tangente donde solo habitaban dioses, había un espíritu, Carcayú enamorado de la Luna, pero su romance se vio interrumpido por otro dios que engañó al enamorado para que bajara a la tierra a recoger flores para regalarselas. El diós cayó en la trampa, pues una vez en la tierra no puede volver a estar cerca de su amada, por eso Carcayú, también conocido como Lobezno se pasa las noches mirando y deseando la Luna. Con esta bonita metáfora y los actos de venganza se sustenta toda la película. Una trama que se estira con un chicle y da vueltas para un lado y para otros y aunque si es verdad que en momentos parece excesivamente liada consigue su objetivo de mantenerte atento/a a la pantalla, de pasar un rato entretenido. La historia de un hombre que la ha olvidado, la historia de una persona condenada a ser diferente, condenada a no poder vivir tranquilo, perseguido por sus posibilidades...

Su gran punto oscuro y muy oscuro son los efectos especiales que son malos, por no decir penosos. Y si fuera en una película donde tiene un guión fuerte y compleja no importa demasiado si los efectos cantan un poco; pero en las películas de superhéroes que normalmente se sustentan en los efectos y las batallas espectaculares los FX se convierten en puntos claves, y cuando éste falla la película queda un tanto coja. Otro punto flojito es el enemigo Masacre (Ryan Reynolds), al durar poco más de hora y media, esperas toda la película para ver la gran batalla con el malo de turno y al final no dura ni 5 minutos.
Las interpretaciones son otra baza con la que juega el film. Los dos personajes principales, Logan y Victor Creed. El segundo está interpretado por Liev Schrieber haciéndo una notable réplica como "enemigo". Por otro lado Hugh Jackman vuelve a ponerse en la piel de Lobezno (Wolverine). Pero esta vez con una preparación física mucho más espectacular, aunque en el fondo sigue siendo el alma del personaje, nadie ve un Lobezno que sea interpretado por Jackman. Además Jackman supone un aliciente más para el público femenino. Como ya pasó en Australia, la productora, guionistas... saben perfectamente que Jackman es hoy en día considerado el hombre más sexy del mundo y lo explotan como nadie. Y yo que me alegro. Porque si los tios babean por ver a

Como conclusión, aunque tiene fallos y no es la mejor de las películas de X-Men si que es interesante hecharle un vistazo siempre y cuando no vayas con demasiadas expectativas. Donde Lobezno sigue siendo ese ser mitad animal mitad caballero.