Parece que el tema del 11-s aun
lo tienen muy reciente en Estados Unidos y divide la crítica. Tras críticas
nefastas, Extremely Loud and Incredibly Close dio la sorpresa recibiendo dos
nominaciones, una en la categoría de mejor película y otra en la categoría de
mejor actor secundario por Max Von Sidow.
Daldry sigue su propio trabajo en
Billy Elliot para volvernos a trasladar en la mente de un chico diferente,
introvertido que le cuesta relacionarse con la gente y expresar sus
sentimientos. En esta ocasión se centra en Thomas Schell, un chico introvertido
con un fuerte vínculo con su padre quien intenta hacerle relacionar con la
gente mediante juegos detectivescos. Después de la muerte de su padre en los
atentados del 11-S contra las Torres Gemelas, Thomas encontrará una llave
escondida en un jarrón. A partir de ese momento su único objetivo será
encontrar la cerradura que abre la llave. En esa aventura se unirá un
misterioso personaje, The Renter quien le ayudará a superar algunos de sus
miedos.
Extremely Loud and Incredibly
Close es una película muy convencional llena de clichés que le sobra
dramatismo, pero le falta fuerza a la historia. En lugar de adentrarse en las
aventuras por Nueva York juega a ser el gran drama de una familia tras una
tragedia. En algunos momentos ese recalque del 11-S se convierte en superfluo.
La película no da el paso final y desaprovecha un personaje secundario algo
desdibujado que hubiera podido dar mucho más juego.
La tragedia del 11 S debería ser
el contexto, un telón de fondo que enriqueciera la historia que nos quiere
contar, en ningún momento coger protagonismo; y aunque algunas veces lo
consigue no puedo evitar notar que ha tirado por lo fácil y al final se ha
dejado vencer por el drama lacrimógeno facilón.
Otro problema de guión es que el
desencadenamiento de los hechos parece demasiado casual, podría ser éste como
podría ser otro, y aunque aceptes todas las licencias que se toma para seguir
la película, si el final no tiene suficiente impulso como para hacerte olvidar
estos detalles todo se va al traste. Y en esta ocasión hace aguas.
Por suerte la película habla
sobre padres, habla sobre ídolos, habla sobre esa persona admirable que cuando
eres pequeño piensas que es única y que es la mejor del mundo. Habla de
aquellas personas que nos enseñaron a ver el mundo con nuestros propios ojos, y
nos dijeron quiénes somos y qué queremos. El fuerte vínculo entre padre hijo y
la desesperada búsqueda para sustituir ese vínculo insustituible y único nos
llevan a disfrutar de los minutos centrales de la película. Chaplin entre las
muchas frases inolvidables dijo “la vida
es una tragedia cuando se mira de cerca, pero vista de lejos es una comedia”.
Cuando se distancia del drama, la película funciona como una suerte de road
movie por las calles de Nueva York y como viaje interior. Pero por desgracia,
Daldry y el guión se empeña en dramatizar las escenas en cuanto puede y acaba
dando la sensación de estar excesivamente sobrecargado.
El protagonista puede ser algo
repelente, pero lo cierto es que esos grandes ojos azules, eso gestos nerviosos
y esas carreras hacia ninguna parte son el único motivo por el que seguimos
mirando la pantalla esperando una sorpresa. Buena actuación de un jovencísimo
Thomas Horn, que está acompañado por Max Von Sydow, Sandra Bullock y Tom Hanks.
Bullock y Hanks cumplen a la perfección, esperan su momento y consiguen
convencer como padres del protagonista. Von Sydow crea un personaje entrañable,
aunque su identidad se intuye fácilmente, la construcción como personaje y su
actuación son muy buenas.
Extremely Loud & Incredibly
Close es una película con resultado irregular, con puntos muy interesantes buenas actuaciones, pero que cae en el drama
fácil.
Nota: 5/10
Pues en general sabes que el film me resultó un poco mejor, aunque con el pasar de los dias la voy pensando mejor y me deja cierto sabor extraño. Disfruté del film porque en realidad no me resultó tan mala como se decía, por el contrario aquí el tratamiento de los hechos y las relaciones afectivas familiares me parecieron mejor retratadas que en otros films, y tiene a su cargo una buena dirección de Daldry, una gran música y unas actuaciones muy aceptables. Tiene sus fallos evidentemente, pero no deja de gustarme.
ResponderEliminarMuy de acuerdo en que a su personaje secundario (Von Sidow) se le pudo sacar más provecho.
Un abrazo!
Pasable...
ResponderEliminarLo mejor Max von Sydow, sin duda aunque su papel sea corto.
Saludos.