Demián Bichir es el nominado
sorpresa del año. Aunque ya había estado nominado por el gremio de actores, muy
pocos eran los que lo metían en sus quinielas, pero lo cierto es que al final
se ha colado, en mi opinión de forma totalmente justa. Bichir se ha puesto a
las manos de Weitz para narrarnos una historia sobre las duras condiciones de
los emigrantes para quedarse sea como sea en Estados Unidos.
El film nos cuenta la historia de
Carlos Galindo, un mexicano de cuarenta años que trabaja de jardinero junto con
un compañero en la ciudad de Los Ángeles. Carlos es un hombre extremadamente
honrado y decente que se rompe la espalda cada día y se juega la vida podando
palmeras para dar una vida mejor a su hijo Luis, un adolescente que no acaba de
comprender el sacrificio de su padre.