Heaven's Gate es una de esas películas que no hace falta haberlas visto para conocer la historia, incluso me atrevería a decir, la mitología que la rodea. Ésta está a la altura de las producciones y grabaciones de Lo Que El Viento se Llevó con tres directores diferentes y a Selznick intentando como sea hacer una buena película, o como Coppola sufrió con su Apocalypsis Now. La diferencia entre esos dos casos y el de Heaven's Gate es fundamental: mientras las dos primeras gozaron del apoyo de la crítica y se han convertido en dos de las mejores películas de la historia, Heaven's Gate se ha convertido en el fracaso más importante de la historia (por encima de Cleopatra).
La pregunta del millón es: ¿La película es simplemente mala, o el ego del director Michael Cimino y todos los problemas del rodaje influyeron a que se considerara la película un desastre sin precedentes?
Para una aficionada al cine, la historia detrás de esta película se vuelve tan interesante que es imposible no verla aunque estés avisada de que probablemente no valga la pena perder el tiempo. Mi sorpresa ha sido, una vez terminada la película. No es una mala película. El problema y los motivos que la hicieron fracasar fueron: Las grandes expectativas (querían hacer un film equiparable a Lo Que El Viento Se Llevó), el ego y perfeccionismo extremo de Cimino (quien estaba en una nube después de recibir todos los elogios posibles merecidamente por El Cazador - The Deer Hunter-), el hecho que se pasará de presupuesto (tenía que costar 3 millones y acabó costando más de 50) y sobre todo, lo que no se le perdona es que arruinara a la mítica productora fundada por Chaplin, Fairbanks, Pickford y Griffith, United Artists.
Centrémonos en la película.
Heaven's Gate es la historia real de una disputa en 1870 en el condado de Johnson entre la Asociación de Ganaderos y un grupo de inmigrantes de la Europa del Este. Los ricos ganaderos acusaron a los inmigrantes de robar su ganado y empezaron una purga mediante una lista negra. El protagonista es Jim Averill, un hombre que estudió en Harvard y que años más tarde ejercería de marshall federal. Un tipo que cree que la justicia está por encima de la riqueza y que protege a los inmigrantes. Paralelamente, Averill tiene una relación con Ella, inmigrante propietaria de una casa de prostitutas. Nate Champion, de orígenes humildes pero ambicioso que apoya a los ganaderos cierra un triángulo amoroso que avanzara a medida que también lo haga la otra trama.
El film con un ritmo pausado y una aura épica plasmada con una bella y plástica fotografía y una buena banda sonora, es una producción megalómana, una superproducción en toda regla. Un film en el que Michael Cimino mantiene su estilo visto ya en El Cazador. Planos largos, muy coreografiados y perfeccionados hasta los pequeños detalles.
Los problemas que no son pocos, empiezan con un exceso de metraje (3 horas y media dura la versión que se estrenó y Cimino pretendía hacer una película de ¡¡más de 5 horas!!), siguen con secuencias sorprendentes como el baile con patines de todo el pueblo, y el peor de todo las tijeras. Después de muchos problemas en el rodaje y ante la imposibilidad de despedir al director (que además es el guionista) le obligaron a recortar el montaje final. Resultado: como si de una venganza se tratara, monta un montaje con transiciones accidentadas y bruscas que acaban destrozando la película. Personajes desdibujados, sobre todo los secundarios, que aparecen y desaparecen en la película sin demasiadas razones (el caso de Hurt es de juzgado de guardia) o escenas importantes que se echan a perder (véase la lucha final).
Interpretativamente todos cumplen pero ninguno destaca. Kris Kristofferson es el protagonista. Aunque no lo hace mal lo cierto es que a veces da la sensación que el papel le va grande, creo que se debería dedicar a lo que de verdad es bueno... escribir canciones. John Hurt, es el personaje más incoherente del film, acaba convirtiendose en el payaso de la función por culpa del montaje. Christopher Walken interpreta a Nate Champion de manera sobria pero lejos de lo que hizo en El Cazador. Jeff Bridges interpreta a John Bridges, hombre de confianza de Averill, un personaje simpático pero del que nos falta información. Y por último, Isabel Huppert aporta el toque femenino al film.
Como conclusión una película infravalorada por la crítica. No es justo que ocupe puestos en los rankings de peores películas hechas con la de mierda que se hace últimamente. Una película que quería convertirse en algo más que El Cazador y ha acabado siendo su sombra.
Nota: 6'5-7/10
PD: si os interesa el tema en youtube hay un documental muy interesante donde a los productores critican a Cimino por pasarse con el presupuesto.
La pregunta del millón es: ¿La película es simplemente mala, o el ego del director Michael Cimino y todos los problemas del rodaje influyeron a que se considerara la película un desastre sin precedentes?
Para una aficionada al cine, la historia detrás de esta película se vuelve tan interesante que es imposible no verla aunque estés avisada de que probablemente no valga la pena perder el tiempo. Mi sorpresa ha sido, una vez terminada la película. No es una mala película. El problema y los motivos que la hicieron fracasar fueron: Las grandes expectativas (querían hacer un film equiparable a Lo Que El Viento Se Llevó), el ego y perfeccionismo extremo de Cimino (quien estaba en una nube después de recibir todos los elogios posibles merecidamente por El Cazador - The Deer Hunter-), el hecho que se pasará de presupuesto (tenía que costar 3 millones y acabó costando más de 50) y sobre todo, lo que no se le perdona es que arruinara a la mítica productora fundada por Chaplin, Fairbanks, Pickford y Griffith, United Artists.
Centrémonos en la película.
Heaven's Gate es la historia real de una disputa en 1870 en el condado de Johnson entre la Asociación de Ganaderos y un grupo de inmigrantes de la Europa del Este. Los ricos ganaderos acusaron a los inmigrantes de robar su ganado y empezaron una purga mediante una lista negra. El protagonista es Jim Averill, un hombre que estudió en Harvard y que años más tarde ejercería de marshall federal. Un tipo que cree que la justicia está por encima de la riqueza y que protege a los inmigrantes. Paralelamente, Averill tiene una relación con Ella, inmigrante propietaria de una casa de prostitutas. Nate Champion, de orígenes humildes pero ambicioso que apoya a los ganaderos cierra un triángulo amoroso que avanzara a medida que también lo haga la otra trama.
El film con un ritmo pausado y una aura épica plasmada con una bella y plástica fotografía y una buena banda sonora, es una producción megalómana, una superproducción en toda regla. Un film en el que Michael Cimino mantiene su estilo visto ya en El Cazador. Planos largos, muy coreografiados y perfeccionados hasta los pequeños detalles.
Los problemas que no son pocos, empiezan con un exceso de metraje (3 horas y media dura la versión que se estrenó y Cimino pretendía hacer una película de ¡¡más de 5 horas!!), siguen con secuencias sorprendentes como el baile con patines de todo el pueblo, y el peor de todo las tijeras. Después de muchos problemas en el rodaje y ante la imposibilidad de despedir al director (que además es el guionista) le obligaron a recortar el montaje final. Resultado: como si de una venganza se tratara, monta un montaje con transiciones accidentadas y bruscas que acaban destrozando la película. Personajes desdibujados, sobre todo los secundarios, que aparecen y desaparecen en la película sin demasiadas razones (el caso de Hurt es de juzgado de guardia) o escenas importantes que se echan a perder (véase la lucha final).
Interpretativamente todos cumplen pero ninguno destaca. Kris Kristofferson es el protagonista. Aunque no lo hace mal lo cierto es que a veces da la sensación que el papel le va grande, creo que se debería dedicar a lo que de verdad es bueno... escribir canciones. John Hurt, es el personaje más incoherente del film, acaba convirtiendose en el payaso de la función por culpa del montaje. Christopher Walken interpreta a Nate Champion de manera sobria pero lejos de lo que hizo en El Cazador. Jeff Bridges interpreta a John Bridges, hombre de confianza de Averill, un personaje simpático pero del que nos falta información. Y por último, Isabel Huppert aporta el toque femenino al film.
Como conclusión una película infravalorada por la crítica. No es justo que ocupe puestos en los rankings de peores películas hechas con la de mierda que se hace últimamente. Una película que quería convertirse en algo más que El Cazador y ha acabado siendo su sombra.
Nota: 6'5-7/10
PD: si os interesa el tema en youtube hay un documental muy interesante donde a los productores critican a Cimino por pasarse con el presupuesto.
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